miércoles, 29 de febrero de 2012

La mujer que vuela, un microrrelato de Fenómenos de circo, el último libro de Ana Mª Shua

-Puedo volar- dice la mujer. Se la ve grande y cansada. Fue bella.
-Trapecista. Una genial trapecista- entiende el director del circo.
-No. Yo vuelo. De verdad.
-¿Con cables invisibles? ¿Con un sistema de imanes, como el mago David Copperfield?
-Usted no entiende. Como Superman.
La mujer alza el vuelo y da una vuelta completa alrededor de la carpa.
-Una gran artista. Pero no es este su lugar, señora -el director es sincero y odia tener que rechazar a una gran artista-. Este es un modesto circo de minicuento. Estoy seguro de que tendrá más suerte en una novela de realismo mágico.

martes, 28 de febrero de 2012

Recuerdos Masticables, poema inédito


RECUERDOS MASTICABLES

Me da miedo el pasado,
que ya no me conmueve.

Mastico los recuerdos
como si fueran chicles gastados por el uso,
insípidos y tercos.

De la lengua,
me ha desaparecido
el sabor a nostalgia,
tan exquisito a veces.

Los aromas e imágenes
de los días huídos
los reviento a mordiscos.
Pero sólo he logrado 
destrozarme los dientes,
sin sentir el alivio que causa a las encías
el hielo de los años.

Me da pena el silencio de todas las sonrisas
desligadas del tiempo.

Y la constatación de que la amnesia
es el único alivio conocido
para el dolor de alma.

sábado, 25 de febrero de 2012

Regresiones, poema inédito




REGRESIONES


Algunas veces
(no puedes evitarlo)
caminas por la calle
con el abrigo perfectamente
abrochado,
salpicando a la gente
con tu seguridad,
como si nadie más que tú
supiera despeinarse la melena
con esa perfección de movimientos
tan bien disimulada.

Te vas mirando en los escaparates
y casi escuchas
la música de fondo,
la voz en off que va rememorando
en breves frases
el recuerdo imborrable
de esa mujer fascinante
que tú eres.

Apenas te hace falta
desenfocar los pasos
para intuir millones de miradas
siguiéndote en pantalla panorámica,
a punto de caer al precipicio
de la emoción sin límites.

Algunas veces
(no puedes evitarlo)
caminas sin querer a ese lugar,
absurdo y discordante,
que transitabas por derecho propio
cuando rondabas los catorce años.

miércoles, 22 de febrero de 2012

"Tesoros para conservar" apareció publicado este otoño en la revista Piedra de molino


TESOROS PARA CONSERVAR

Hago acopio de abrazos
y de diminutivos.
Los meto entre las hojas de los libros
o en cajas de latón,
de esas que te regalan para guardar las joyas
que ni tienes
ni has querido tener nunca.

Cuando te llegue el tiempo del gruñido,
y el exabrupto a destiempo
se vuelva rutinario.
Cuando sólo haya besos
en fechas señaladas
o a la orilla de un tren
a punto de arrancarte,

estaré preparada
para sobrevivir con estas rentas
que tus años de infancia
me han dejado:

torbellino de afectos
ofrecidos de forma tan sincera
y generosa
que serán suficientes
para calmar el frío de todas mis vidas
y algunas de mis muertes.

Julia Conejo

martes, 21 de febrero de 2012

Un poema de Otra ciudad, otra vida, de Karmelo C. Iribarren

PERPLEJIDAD

Desde el bar
-al otro lado de la calle-,
observo una boca de metro:

la gente
sube
y baja,
entra y sale,

y todos
parecen tener claro
a dónde van.

Es fascinante.

lunes, 20 de febrero de 2012

Telas mal cortadas. Un poema de "Muñecas recortables"

TELAS MAL CORTADAS

Había soledad en su mirada,
aunque nunca lo supo.
Tierra seca entre las uñas
que agredían con fuerza sus cabellos.
Y un olor a derrota
en todos los vestidos, polvorientos y tristes,
de su armario.

Llenó su vida
de ovillos de colores y telas mal cortadas.

Sin saber para qué.

Sin entender jamás
por qué al juntarse
en una misma cesta dos madejas
de tonos diferentes y distinto tamaño,
es ley universal
que acaben siempre
sus hilos
enredados.