TELAS MAL CORTADAS
Había soledad en su mirada,
aunque nunca lo supo.
Tierra seca entre las uñas
que agredían con fuerza sus cabellos.
Y un olor a derrota
en todos los vestidos, polvorientos y tristes,
de su armario.
Llenó su vida
de ovillos de colores y telas mal cortadas.
Sin saber para qué.
Sin entender jamás
por qué al juntarse
en una misma cesta dos madejas
de tonos diferentes y distinto tamaño,
es ley universal
que acaben siempre
sus hilos
enredados.
Hola Julia!! Me encantó tu libro!! ya te lo había dicho, espero que subas más publicaciones de tus poesias! un saludo
ResponderEliminarRaquel
Gracias, Raquel. Esa es la idea, compartir aquí poesías mías y también de otros autores que me gustan. Besos.
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