lunes, 29 de diciembre de 2014

Semejanzas, un poema de "Muñecas recortables"


SEMEJANZAS



En algún rincón de esta vieja casa

-con paredes de colores

que antes eran estampadas-

tú sigues cantando, como aquellas nochebuenas,

a la niña de bizcocho

que era yo.



Tú sí hubieras entendido:

El entramado amargo de mi alma

está compuesto

con el mismo tejido

que formaba la tuya.



Tú si hubieras escuchado:

Mi llanto tiene acordes aprendidos

en los pliegues sinuosos de tu cara.



Me hubieses mirado

con ternura infinita.

Me hubieses hablado

del dolor de existir,

con el corazón a la intemperie,

desangrándose

en todos los rincones.



¡Qué dura es la vida –hubieras dicho-

en esta parte del país!



Y yo me hubiese sentido
un poco menos vencida. 

JULIA CONEJO